Mostrando entradas con la etiqueta responsabilidad personal. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta responsabilidad personal. Mostrar todas las entradas

Ser Singular

Pasamos mucho tiempo de nuestra vida trabajando intensamente para ser "buenas personas", " de provecho", ser como tal o como cuál que actúan como modelos de comportamiento. Este es un proceso de aprendizaje muy habitual; ya en los primeros cursos del colegio miramos al otro niño que pinta sin salirse de la raya para aprender a hacerlo mejor.

Este proceso de comparación social nos ayuda a mejorar y nos impide tener que aprender todo desde cero; la verda es que nos ayuda y nos resulta un recurso muy potente. Lo cierto es que si bien en PNL lo utilizamos como una potente herramienta de aprendizaje acelerado; también es cierto que no es de aplicación para todos los campos.

Mi visión personal es que cada uno de nosotr@s tiene algo especial, tiene un don, habilidad, destreza o llámale como quieras, que puede entregar a los otros o utilizarlo como su aportación al mundo. Este es el tema, aquí no valen las comparaciones en ser más o menos que otra persona.

El desafío que cualquiera de nosotr@s debe enfrentar es encontrar su propia singularidad. Encontrar su para qué y dedicarse a eso con todo su esfuerzo. ¿Acaso pedimos a Rafa Nadal que juegue bien a ajedrez, esperamos de Fernándo Alonso que sepa resolver sudokus? Visto así, es obvio ¿verdad?.

Entonces qué nos impide pensar del mismo modo para nuestras vidas, en el día a día. Me diréis que esto está muy bien pero que tenéis muchos frentes abiertos y mucho trabajo por hacer, que no tenéis apoyo para dedicarse a lo que se os da bien...todo eso es cierto, seguro.

Y también es cierto que en ocasiones nos esforzamos con más empeño que acierto en llegar a unas cotas de perfección sin saber dónde están lo límites, que intentamos cubrir todos los escenarios y que al final terminamos exhaustos y con la sensación de avanzar apenas unos centimetros no sabemos hacia dónde.

Mi propuesta es Salva tu presente (ahí seguramente está tu trabajo, ingresos, compromisos adquiridos con familia, jefes, compañeros, amigos) pero cuida de tu singularidad. Cuida de esa parte de ti que és única a tus ojos y a ojos de los demás, cuida por hacerla crecer; puede ser que esa forma especial de hacer algo sea lo que te ayude a ganarte la vida, sea lo que sea cuida de eso y no aceptes fotocopias de mala calidad de la singularidad de otra persona.

La apuesta vale la pena y el esfuerzo. Antes que se me olvide...¿sabías que estamos hechos con los mismo átomos de las estrellas? ;-)

Remover obstáculos y responsabilidad personal

En una sesión de coaching de equipo directivo,he tenido la experiencia que el grupo no evolucionaba con la sesión. Los contenidos no encajaban en el dia y las cosas resultaban difíciles de avanzar.
Una y otra vez se repetía un discurso, en cierto modo socialmente aceptado (y en lo personal cargad de razones y evidencias) por todos los miembros, de crítica constante de “esto no funciona”, “la dirección tendría que ver qué está pasando”, “ no tenemos responsabilidad sobre lo que nos ocurre”, etc, etc, etc.
Al final sólo he hecho una pregunta, inocente y poderosa: ¿Y con todo esto que nos sucede, nosotros qué vamos a hacer? Esta pregunta sencilla tiene múltiples connotaciones que me gustaría compartir con vosotros:
1. Lleva la atención a alguna cosa que está dentro de tu (cito a S. Covey) círculo de influencia. Dónde tu puedes tener impacto en los resultados finales y de proceso; en contraposición de tu círculo de preocupación en el que tienes muchas preocupaciones pero ningún margen de actuación.
2. Implica necesariamente ser parte activa en el proceso de cambio y de transformación de la realidad inmediata en la que te encuentras. Esto quiere decir también que nosotros somos actores y resultados del propio cambio que operamos.
3. Enriquece la visión tradicional del jefe explotador y al que podemos criticar porqué si, porqué está ahí, a una visión más madura dónde nosotros complementamos a nuestro jefe y formamos así un equipo de alto rendimiento
De si debemos o no asumir este tipo de rol podemos tratar en otro post, dejo a vuestras aportaciones como continuar.
En cualquier caso lo interesante del tema y de la sesión es que las dificultades salen a la superficie, y con este proceso de salir puedes tratarlas, cuestionarlas, acompañarlas, removerlas al fin y al cabo para cuestionar patrones estériles de queja inútil. Que si bien te cargan de razones y te permiten justificar tus acciones en la máquina de café de tu empresa, no apoyan en nada tu proceso de crecimiento personal y profesional, ni la organización que mejora tu desempeño.
Me gustaría compartir con vosotros una cita:
Nuestro mayor temor no consiste en no ser adecuados. Nuestro mayor temor consiste en que somos poderosos más allá de toda medida. Es nuestra luz y no nuestra oscuridad lo que nos atemoriza. Nos preguntamos:” ¿Quién soy yo para ser brillante, espléndido, talentoso, fabuloso”.
Pero, en realidad, ¿quién eres para tú para no serlo? Eres hijo de Dios. Tus pequeños juegos no sirven al mundo. Disminuirte a ti mismo para que los demás no se sientan inseguros a tu lado no tiene nada que ver con la iluminación.

Todos estamos hechos para brillar, como brillan los niños. Nacemos para manifestar esta gloroa del Dios que está dentro de nosotros. Y no es que esté sólo en algunos; está en todos nosotros. En la medida en que dejamos que brille nuestra propia luz, damos a otros permiso para hacer lo mismo. En la medida en que nos liberamos de nuestro temor, nuestra presencia libera automáticamente a otros. Marianne Willialsom (citada por Nelson Mandela)
Centra tu energía en aquello que puedas cambiar, mejorar, innovar, impactar y remueve lo que no funciona; puede ser que tengamos oposición interna pero el tiempo invertido aquí es una alternativa necesaria.
Nada más aviso a navegantes y mucha suerte a todos.