¿Cuanto te cuesta tu EGO?


Hace unos días trabajando con una persona en pleno desarrollo profesional, me encuentro con un profesional de solida formación que esta cubriendo un número importante de "inter-espacios" de su empresa. Cuando digo inter-espacios me refiero a esas zonas que no pertenecen a nadie pero que tarde o temprano alguien termina realizando; no están en ninguna definición de misión o responsabilidades y por añadidura nadie tiene en cuenta a la hora de los reconocimientos.

Pues bien, la cuestión es que esta persona se encuentra de forma progresiva cubriendo esos espacios que no son de nadie, asumiendo también las propias responsabilidades y llegando a un punto de colapso (seguro que a muchos os resulta una situación familiar ¿verdad?), y ¿cómo es esto posible?

Después de preguntar y de algunas vaguedades...ya nos salió el ego y la necesidad de reconocimiento, la necesidad de la palmada en la espalda, de figurar, destacar sobre el compañero/rival en fin que os voy a contar...y también salió el coste real de eso: todo el tiempo que dedico a algo para lo que no me pagan, a algo que no está alineado con mi misión en la compañía, al tiempo y espacio que eso ocupa y que no deja espacio para otras cosas y al nuevo espacio que tengo que crear para dar cabida a "eso" que antes no estaba.

No me entiendas mal; no se trata de no hacer nada más allá del propio puesto, ni de cerrarse en banda, ni de tener una actitud poco colaboradora; se trata de la gestión de lo razonable y de lo sostenible. Sucede que una interpretación estrecha de la realidad acompañada por debilidades humanas nos mete en problemas.
Entonces se abren algunas cuestiones a tener en cuenta:
  1. Tomar consciencia qué eso está sucediendo (y no tiene que ver con la responsabilidad profesional, seamos serios y honestos con nosotros mismos).

  2. Darse cuenta del precio y coste real que nos está suponiendo y empezar a tomar decisiones.

  3. ¿Qué precio estoy dispuesto a pagar?

  4. ¿Cuál es el punto de mi desequilibrio?¿Cuál el límite razonable?

  5. ¿Cómo transformo esta sobrecarga de forma positiva en espacios reconocidos y valorados por la compañía?

  6. Finalmente : ¿Cómo cuido de mi ego sin dejarme la piel en el intento?

Debemos estar atentos, nuestros entornos profesionales son en si mismos exigentes como para ir añadiendo presión por nuestras "flaquezas".

Un abrazo y hasta pronto.

Toni


3 comentarios:

10 de marzo de 2009, 10:35 Si hay alguien más dijo...

Sigo aprendiendo.. y contigo todo me es aprovechable. Sabes llegar al fondo y dar un buen soplo de oxigeno a las más ocultas de nuestras motivaciones, y nos haces ser más conscientes, reflexionar...

Te felicito Toni.

Abrazos.

Saracobosb.

12 de marzo de 2009, 16:36 El lobo estepario dijo...

Buena reflexión.
El ego, capaz de lo mejor y de lo peor.

Por eso es importante encontrar el sitio más idóneo en la organización; para además de trabajar, disfrutar con ello. Y así dejar satisfecho a nuestro ego.

Un abrazo.

12 de marzo de 2009, 22:17 Toni Pinies dijo...

Gracias Sara y Lobo por vuestros comentarios. ¿Qué fácil es meterse en lios verdad?.
Gracias por estar ahí.
Toni
pd: hemos creado http://inspira-valorsipersones.blogspot.com. Espero que os gustes también.

Publicar un comentario

Gracias por tu aportación, las ideas y opiniones que recogemos hacen que trabajemos para darte un mejor servicio.